ABERRI EGUNA 2010

Aberri Eguna 2010

El Comité Nacional de ELA aprobó el pasado 22 de marzo una declaración en relación al Aberri Eguna de este año.

Irakurri adierazpen osoa EUSKARAZ

Aberri Eguna 2010

Resolución del Comité Nacional de ELA

22 de marzo de 2010

[OBJETO] El Comité Nacional quiere, como en años anteriores, aprovechar el Aberri Eguna para

trasladar a la base social del sindicato su reflexión sobre el momento social y político.

[LA CRISIS] Si la reivindicación nacional debiera hacer referencia a los elementos compartidos y

compartibles por un pueblo, debemos seguir lamentando los efectos de una crisis que padece casi en

exclusiva una parte de la sociedad, la clase trabajadora. El pasado mayo la mayoría sindical vasca

promovió una huelga general para advertir sobre la urgencia de modificar las políticas públicas para

orientarlas a la creación de empleo y la protección social de los trabajadores y trabajadoras. Pasado

casi un año se han cumplido los peores pronósticos. Por un lado, la patronal aprovecha la crisis y el

miedo de muchos trabajadores para desmontar los logros alcanzados durante años por la lucha

sindical, para romper las reglas del juego y para atacar a la propia libertad sindical. Por otro, la

ideología neoliberal sigue orientando las políticas públicas lideradas por las instituciones vascas, al

margen de las fuerzas que gobiernen. Y, finalmente, en el estado, los poderes políticos y económicos

han decidido imponer políticas de ajuste, políticas de derecha, que benefician a la banca y a la

patronal. Así, las reformas del sistema de pensiones, del mercado de trabajo y de la negociación

colectiva que se anuncian –amparadas además por los dos sindicatos mayoritarios del estado–

sitúan en un escenario muy negativo a la clase trabajadora. Mientras tanto, no se ha arbitrado

ninguna medida que contraríe los intereses de los poderes económicos y financieros.

[MARCO VASCO] En este contexto, queda más en evidencia la imposibilidad de las instituciones

del país para legislar en materia laboral, social y sindical, que siguen siendo competencia del estado.

Faltan también instrumentos económicos y financieros. Se trata de carencias contrarias a la

aspiración de autogobierno ampliamente extendida entre la ciudadanía vasca y, lo que es más grave,

aleja el debate social de nuestro ámbito de intervención, permitiendo que las principales fuerzas

políticas del país no tengan ni siquiera necesidad de posicionarse política y públicamente en una

coyuntura tan grave. A ello hay que sumar que el actual gobierno de la CAPV, configurado para

completar la uniformización del estado, y con la connivencia de patronal y sindicatos españoles, haya

decidido marginar a la mayoría sindical de diversos órganos de participación. Si a ello añadimos que

las reformas citadas antes van a gozar del aval de los sindicatos que son minoría en nuestro país,

resulta lógico que se extienda, entre los trabajadores y trabajadoras que ELA representa, el deseo de

construir una nación soberana e independiente.

[SINDICALISMO] ELA cree y trabaja por que la organización social del país y la propia identidad

nacional se conformen en torno a valores de justicia social y solidaridad. Esa es su vocación y su

aportación más genuina al proceso de emancipación nacional. Vocación y aportación que en esta

festividad el sindicato quiere renovar y acrecentar. Con el ataque que viene padeciendo la clase

trabajadora por parte de los poderes políticos y económicos, y con un sindicalismo español dispuesto

a dar carta de naturaleza a los objetivos políticos y sociales del estado en el marco del diálogo social

–a cambio de financiación y usurpando incluso la representatividad ajena– , ELA considera que es

preciso situar la crisis y sus efectos como ámbito prioritario de acción sindical, social y política.

[AGRADECIMIENTO] El Comité nacional quiere, en este contexto, mostrar su agradecimiento más

sincero a la militancia de ELA, trabajadores y trabajadoras que de manera silenciosa pero firme están

dando una respuesta ejemplar a esta situación de crisis, organizando la lucha sindical y la solidaridad

en cada centro de trabajo en unas condiciones muy adversas de amenaza y chantaje patronal. Esos y

esas militantes constituyen para nosotros y nosotras la más firme esperanza de un futuro de progreso

y libertad para nuestro pueblo.

[URGENCIAS DEMOCRATICAS] Sin perder el horizonte más estratégico en la lucha nacional, el

proceso de emancipación plena tiene que recorrer, en el espacio más inmediato, estadios mucho más

básicos de reivindicación y contienda política. El sinfín de males provocados por la escasa raigambre

democrática del estado español –que se traduce en un estado de excepción para con nuestro país–

constituye una llamada urgente a otras tantas luchas que las fuerzas democráticas vascas tenemos

que asumir desde el momento presente. Es urgente responder a la razón de estado.

[DERECHOS HUMANOS] Esa razón de estado hace referencia, en primer lugar, a los muchos

problemas derivados de las políticas represivas y conculcadoras de derechos humanos propiciadas

por el estado como son la persistencia de una política penitenciaria inhumana (dispersión, presos

enfermos, condenas de por vida, cacheos a familiares...); los casos de malos tratos y torturas, cuya

opacidad se acrecienta con una legislación antiterrorista impropia de un país democrático; los

secuestros express de personas; la persistencia de los macrojuicios contra auténticos espacios

sociales bajo tipos penales indeterminados… Junto a todo ello, lo que vamos conociendo en relación

con la desaparición y muerte de Jon Anza nos devuelve a los episodios más negros de la guerra

sucia.

[PRINCIPIOS DEMOCRÁTICOS] En segundo lugar, hay que citar los más elementales principios

democráticos que no se respetan en el ámbito legislativo, judicial y ejecutivo. Nos referimos a asuntos

tan dispares como las reformas legales planteadas por el Gobierno español para tratar de

imposibilitar la presencia de la izquierda abertzale ilegalizada en las elecciones y en las instituciones;

la multiplicación de procesos judiciales a iniciativa de organizaciones de extrema derecha; las

detenciones de personas sobre las que sólo se predica su actividad política... Junto a ello, el acceso

del PSE-EE a la lehendakaritza, con el apoyo del PP, valiéndose de una mayoría parlamentaria

lograda excluyendo de las elecciones a una parte de la sociedad vasca, completa un panorama de

difícil parangón en las democracias del entorno. Esa mutilación de la democracia, evidentemente,

tiene un objetivo: completar el proceso de uniformización del estado. En este sentido, debemos

denunciar también la utilización que de la Ertzaintza o la EITB viene haciendo el nuevo gobierno.

[CULTURA] En tercer lugar, tenemos que denunciar la dirección de las políticas de los gobiernos de

los estados y de los dos gobiernos autonómicos en relación con la educación, la lengua y la cultura.

Quienes se jactan de un sano patriotismo constitucional han hecho de la cuestión etnolingüística un

eje fundamental de su política, entendiendo que debe desandar el camino realizado en las últimas

décadas. Su política no tiene más inspiración que la advertencia realizada en su día por el Conde

Romanones: “pueblo que su lengua cobra, su independencia recobra”. Por ello, la coyuntura presente

vuelve a poner de manifiesto la urgencia de que las mayorías de este país logren acuerdos en

cuestiones básicas como la manera en que puede garantizarse el vivir y ser escolarizado en euskara,

o incluso algo tan básico como el modo en que debemos llamar a nuestro propio pueblo, Euskal

Herria, expresión secular que se pretende proscribir.

[AUTODETERMINACIÓN] Y en cuarto lugar, a subrayar en el contexto de esta celebración, la

necesidad de alcanzar mayores cotas de autogobierno y la de lograr un sistema de garantías

democráticas, en el que todos los proyectos políticos sean posibles, sigue siendo una cuestión muy

sentida para amplias sectores del país. El derecho de autodeterminación es un derecho democrático

pero no reconocido por los españolistas, por el cual quienes queremos cambiar las cosas vamos a

tener que trabajar a fondo. La reivindicación de este derecho, y el autogobierno en general, debería

constituir de manera urgente un elemento de contienda real con el estado, compartido por el conjunto

de fuerzas democráticas del país.

[ACUERDO DE MÍNIMOS] ELA es consciente de que la dinámica en pos de determinadas

reivindicaciones nacionales y políticas debe conjugarse en la dinámica temporal con las legítimas

aspiraciones partidarias y electorales de las organizaciones políticas. Pero entiende, asimismo, que

cuestiones básicas relacionadas con los derechos humanos, la democracia, el euskara y el derecho a

decidir deberían formar parte de acuerdos de mínimos para responder a esa razón de estado que

quiere imponerse. Esos mínimos, hoy sin determinar, deberían estar blindados para garantizar el

compromiso en el trabajo social y político de quienes libremente los suscriban. Ese es, a nuestro

parecer, el reto actual de los soberanistas. Necesitamos unos mínimos que nos comprometan. Y ese

reto no se puede ni se debe confundir con la legítima lucha de espacios electorales.

[ALIANZAS] En este sentido, la voluntad inclusiva y no exclusiva en la configuración de las alianzas

y la búsqueda sincera de la pluralidad deben ser criterios orientadores básicos entre los aliados.

Junto a ello, deben superarse iniciativas del pasado donde se buscaba más la disolución de las

organizaciones que dar la debida fuerza y consideración a las interlocuciones reales de esas

organizaciones. En más de una ocasión hemos señalado, asimismo, el carácter ejemplar de luchas

como las que están desarrollando la Euskal Herriko Laborantza Ganbara o la Plataforma Batera. Y

contemplamos ahora con sana envidia las consultas que se han realizado en muchos municipios de

Iparralde en torno a una institucionalización propia.

[VÍAS CIVILES] Los métodos civiles, finalmente, constituirán la mejor fuente de legitimación social

de esas luchas. En esta dirección, ELA ha valorado positivamente las conclusiones del debate

realizado por la izquierda abertzale ilegalizada. Sin entrar a valorar los relatos de legitimación pasada

y presente de cada organización –que, en cualquier caso, tiene derecho a construir para sí misma–

consideramos que la apuesta unilateral por las vías civiles abre un escenario de esperanza para

nuestro pueblo. Se trata de la mejor apuesta para responder a los desafíos del momento presente,

con un estado desaforado, violento y antidemocrático, que cuenta además con amplio sostén

internacional para manejar a su manera la llamada cuestión vasca. En cualquier caso, una vez más,

exigimos a ETA que abandone definitivamente el camino de la violencia y cese de inmediato su

amenaza sobre tantos conciudadanos.

[LLAMADA] El Comité Nacional anima a los trabajadores y trabajadoras vascas a dar su adhesión y

a militar en el sindicalismo abertzale que ELA representa: un sindicalismo autónomo política y

financieramente; un sindicalismo reivindicativo, y un sindicalismo comprometido con la emancipación

nacional y de clase de todos los que trabajan en Euskal Herria, sea cual sea su identidad nacional, su

cultura, lengua, religión, edad u opción sexual.

Gora euskal langileria!

Gora Euskal Herria askatuta!