
El túnel más largo y el viaducto más alto de euskal herria forman parte de la Eibar-Gasteiz
Unos 300 operarios trabajan las 24 horas del día en la excavación del túnel más largo de Euskal Herria, el que unirá los tramos guipuzcoano y alavés de la AP-1 a través de 3.377 metros excavados en la montaña, 2.077 pertenecientes a Gipuzkoa y otros 1.300 a suelo alavés. Son algunos de los datos del nuevo túnel de Arlaban, oficialmente denominado Isuzki-tza, que será uno de los hitos constructivos de la autopista Eibar-Vitoria, un proyecto marcado por los récords.
61 cámaras de control, 60 paneles de mensajes variables, 216 ventiladores, 55 postes de socorro y cantidad de instalaciones de alumbrado, ventilación y sistemas de control de incendios compondrán, además, las tripas de este coloso bajo tierra por el que se calcula que circularán 25.000 vehículos al día.
Y a pocos metros del túnel de Isuzkitza se encuentra otra gran obra de ingeniería: el viaducto de Marín, con sus 100 metros de altura, se convierte en el puente más elevado erigido nunca en la Comunidad Autónoma Vasca y Navarra.
El director técnico de Bidegi, Agustín Zugasti, subraya la complejidad de estas obras, así como del viaducto de Arbizelai, en Ezkoriatza, "que se ha construido atirantado para salvar sin apoyos el río Deba".
En esta carretera todo son récords, y también lo será su coste. Sólo la excavación del túnel de Arlaban costará 120 millones de euros, es decir, más de 36 millones cada kilómetros, a lo que hay que añadir otros 19 millones en instalaciones interiores de la infraestructura. Y no sólo eso. En total, serán casi 300 millones de euros lo que deberán desembolsar las arcas forales para sufragar los 17 kilómetros en construcción en este punto de Gipuzkoa.
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